Psalm 71

Neue Genfer Übersetzung

von Genfer Bibelgesellschaft
1 Bei dir, HERR, habe ich Zuflucht gefunden – lass mich nie in Schande geraten!2 Erweise mir deine Treue, hilf mir und befreie mich[1], neige dich zu mir herab und schenke meinem Rufen ein offenes Ohr! Rette mich doch!3 Sei für mich ein Fels, ein sicheres Zuhause, zu dem[2] ich immer fliehen kann. Du hast ja fest beschlossen, mich zu retten. Denn mein Fels und meine Burg, das bist nur du![3] (Ps 31,2)4 Mein Gott, befreie mich aus den Fängen der Gottlosen, rette mich aus den Klauen verbrecherischer und gewalttätiger Menschen!5 Denn du allein bist meine Hoffnung, Herr, ja, HERR, du bist meine Zuversicht von meiner Jugend an.6 Seit mein Leben begann, bist du mein Halt, aus dem Mutterleib hast du mich ans Licht gezogen.[4] Dich will ich loben allezeit.[5] (Ps 22,10)7 Für viele bin ich zu einem abschreckenden Beispiel geworden[6], du aber bist meine sichere Zuflucht.8 Mein Mund ist voll deines Lobes, lässt deinen Ruhm erklingen den ganzen Tag.9 Stoße mich auch jetzt nicht von dir, wo ich alt geworden bin; wenn meine Kräfte mehr und mehr schwinden – auch da verlass mich nicht!10 Denn meine Feinde reden schon ´das Schlimmste` über mich, und die mir nach dem Leben trachten, beraten sich.11 Sie sagen: »Gott hat ihn verlassen! Verfolgt und ergreift ihn, denn keiner ist da, der ihm hilft!«12 Gott, zieh dich nicht von mir zurück[7], eile schnell herbei, um mir zu helfen!13 Scheitern und umkommen sollen alle, die mich bis aufs Äußerste bekämpfen[8], mit Schimpf und Schande beladen seien alle, die mich ins Unglück stürzen wollen!14 Ich aber werde stets ´auf dich` hoffen und noch mehr dazu beitragen, dass man dich überall rühmt[9].15 Aus meinem Mund wird man hören, wie du deine Treue erweist, den ganzen Tag will ich davon reden, dass du Rettung schenkst. Ich kann gar nicht mehr zählen, wie oft du schon geholfen hast![10]16 Ich will ´zum Heiligtum` kommen, um die mächtigen Taten Gottes, des HERRN[11], zu verkünden. Deine Treue[12] will ich preisen, dich allein will ich rühmen.17 Gott, schon von meiner Jugend an hast du mich unterwiesen, und bis zum heutigen Tag verkünde ich deine Wunder.18 Verlass mich nicht im Alter, mein Gott, auch nicht, wenn ich ein Greis mit weißen Haaren bin. Denn noch der Generation nach mir möchte ich verkünden, wie du eingreifst[13]; allen, die noch kommen, will ich von deiner Macht erzählen.19 Gott, deine Treue ist so groß, dass sie bis an den Himmel reicht[14]! Du hast große Wunder getan – Gott, wer ist dir gleich?20 Du hast uns[15] Nöte und bitteres Leid erfahren lassen, du wirst uns auch wieder neues Leben schenken und uns aus den tiefsten Abgründen der Erde emporführen.21 Du wirst mein Ansehen vor den Menschen wiederherstellen, du wendest dich ´mir erneut zu` und tröstest mich.22 So will ich dich nun preisen zum Spiel auf der Harfe, dich loben für deine Treue, mein Gott. Ich will dir Psalmen singen zur Zither, du heiliger Gott Israels[16].23 Jubel soll über meine Lippen kommen, wenn ich ein Lied für dich anstimme. Auch meine Seele, die du erlöst hast, jubelt dir zu.24 Mit meinem Mund will ich den ganzen Tag verkünden, dass du deine Treue erweist.[17] Denn gescheitert und mit Schande bedeckt stehen alle da, die mich ins Unglück stürzen wollen. //

Psalm 71

Nueva Versión Internacional

von Biblica
1 En ti, Señor, me he refugiado; jamás me dejes quedar en vergüenza.2 Por tu justicia, rescátame y líbrame; dígnate escucharme, y sálvame.3 Sé tú mi roca de refugio adonde pueda yo siempre acudir; da la orden de salvarme, porque tú eres mi roca, mi fortaleza.4 Líbrame, Dios mío, de manos de los impíos, del poder de los malvados y violentos.5 Tú, Soberano Señor, has sido mi esperanza; en ti he confiado desde mi juventud.6 De ti he dependido desde que nací; del vientre materno me hiciste nacer. ¡Por siempre te alabaré!7 Para muchos, soy motivo de asombro, pero tú eres mi refugio inconmovible.8 Mi boca rebosa de alabanzas a tu nombre, y todo el día proclama tu grandeza.9 No me rechaces cuando llegue a viejo; no me abandones cuando me falten las fuerzas.10 Porque mis enemigos murmuran contra mí; los que me acechan se confabulan.11 Y dicen: «¡Dios lo ha abandonado! ¡Persíganlo y agárrenlo, que nadie lo rescatará!»12 Dios mío, no te alejes de mí; Dios mío, ven pronto a ayudarme.13 Que perezcan humillados mis acusadores; que se cubran de oprobio y de ignominia los que buscan mi ruina.14 Pero yo siempre tendré esperanza, y más y más te alabaré.15 Todo el día proclamará mi boca tu justicia y tu salvación, aunque es algo que no alcanzo a descifrar.16 Soberano Señor, relataré tus obras poderosas, y haré memoria de tu justicia, de tu justicia solamente.17 Tú, oh Dios, me enseñaste desde mi juventud, y aún hoy anuncio todos tus prodigios.18 Aun cuando sea yo anciano y peine canas, no me abandones, oh Dios, hasta que anuncie tu poder a la generación venidera, y dé a conocer tus proezas a los que aún no han nacido.19 Oh Dios, tú has hecho grandes cosas; tu justicia llega a las alturas. ¿Quién como tú, oh Dios?20 Me has hecho pasar por muchos infortunios, pero volverás a darme vida; de las profundidades de la tierra volverás a levantarme.21 Acrecentarás mi honor y volverás a consolarme.22 Por tu fidelidad, Dios mío, te alabaré con instrumentos de cuerda; te cantaré, oh Santo de Israel, salmos con la lira.23 Gritarán de júbilo mis labios cuando yo te cante salmos, pues me has salvado la vida.24 Todo el día repetirá mi lengua la historia de tus justas acciones, pues quienes buscaban mi mal han quedado confundidos y avergonzados.

Psalm 71

La Biblia Textual

von Sociedad Bíblica Iberoamericana
1 Oh YHVH, en ti he puesto mi confianza, No sea yo avergonzado jamás.2 ¡Líbrame en tu justicia, y hazme escapar! ¡Inclina a mí tu oído, y sálvame!3 Sé para mí roca de refugio, Adonde recurra yo continuamente. Tú has dado mandamiento para salvarme, Porque Tú eres mi Roca y mi baluarte.4 Dios mío, rescátame de la mano del malvado, De la mano del perverso y del violento,5 Porque Tú, oh Adonay YHVH, eres mi esperanza; Mi confianza desde mi juventud.6 Por ti he sido sustentado desde el vientre, Tú eres quien me sacó de las entrañas de mi madre, ¡De ti será mi alabanza perpetuamente!7 He venido a ser asombro para muchos, Pero Tú eres mi refugio fuerte.8 Llena está mi boca de tu alabanza, Y de tu gloria todo el día.9 No me deseches en el tiempo de la vejez, Ni me desampares cuando se agote mi vigor.10 Porque mis enemigos han hablado contra mí, Y los que acechan mi alma conspiran unidos,11 Diciendo: ’Elohim lo ha desamparado, ¡Perseguidlo y prendedlo, pues no hay quien lo libre!12 ¡Oh ’Elohim, no te alejes de mí! Dios mío, apresúrate a socorrerme.13 Sean avergonzados y perezcan los adversarios de mi alma; Sean cubiertos de vergüenza y confusión los que procuran mi mal.14 En cuanto a mí, esperaré por siempre, Y te alabaré más y más.15 Mi boca proclamará tu justicia y tu salvación todo el día. Aunque no sepa enumerarlos,16 Vendré a los poderosos hechos de Adonay YHVH, Haré mención de tu justicia, de la tuya sola.17 Tú ’Elohim, me has enseñado desde mi tierna infancia, Y hasta ahora he manifestado tus maravillas.18 Así Tú también, hasta la vejez y las canas No me desampares, oh ’Elohim, hasta que proclame tu poder a esta generación, Tu poderío, a todo el que ha de venir.19 También tu justicia, oh ’Elohim, llega hasta las alturas, Y aquellas grandes cosas que has hecho. ¿Quién como Tú, ’Elohim?20 Tú, que me has hecho ver muchas angustias y males, Volverás a darme vida, Y de nuevo me levantarás de los abismos de la tierra,21 Aumentarás mi grandeza, Y volverás a consolarme.22 Yo también te alabaré con el salterio, A causa de tu verdad, Dios mío, Te cantaré salmos con el arpa, ¡oh Santo de Israel!23 Mis labios se alegrarán al entonarte salmos, Junto con mi alma, que Tú has redimido.24 Mi lengua también susurrará todo el día tu justicia, Porque fueron avergonzados y confundidos los que procuraban mi mal.