Psalm 19

Elberfelder Bibel

von SCM Verlag
1 Dem Chorleiter. Ein Psalm. Von David.2 Der Himmel erzählt die Herrlichkeit Gottes, und das Himmelsgewölbe[1] verkündet seiner Hände Werk. (Ps 8,4; Röm 1,20)3 Ein Tag sprudelt dem anderen Kunde zu, und eine Nacht meldet der anderen Kenntnis –4 ohne Rede und ohne Worte, mit unhörbarer Stimme.5 Ihre Messschnur geht aus über die ganze Erde und bis an das Ende der Welt ihre Sprache. In ihm[2] hat er der Sonne ein Zelt gesetzt.6 Und sie, wie ein Bräutigam aus seinem Gemach tritt sie hervor; sie freut sich wie ein Held, die Bahn zu durchlaufen.7 Am ⟨einen⟩ Ende des Himmels ist ihr Aufgang und ihr Umlauf bis zum ⟨anderen⟩ Ende, und nichts ist vor ihrer Glut verborgen.8 Das Gesetz des HERRN ist vollkommen, es erquickt die Seele; das Zeugnis des HERRN ist zuverlässig, es macht den Einfältigen weise. (Ps 93,5; Ps 111,7; Ps 119,130; Röm 7,12)9 Die Vorschriften des HERRN sind richtig, sie erfreuen das Herz; das Gebot des HERRN ist lauter, es macht die Augen hell. (Ps 12,7; Ps 119,111)10 Die Furcht des HERRN ist rein, sie besteht in Ewigkeit. Die Rechtsbestimmungen des HERRN sind Wahrheit[3], sie sind gerecht allesamt;11 sie, die begehrenswerter sind als Gold, ja viel gediegenes Gold, und süßer als Honig und Wabenhonig. (Ps 119,72; Ps 119,103)12 Auch lässt sich dein Knecht durch sie warnen; in ihrer Befolgung ⟨liegt⟩ großer Lohn. (Jak 1,25)13 Verirrungen – wer bemerkt sie? Von den verborgenen ⟨Sünden⟩ sprich mich frei!14 Auch von Übermütigen halte deinen Knecht zurück; sie sollen nicht über mich herrschen! Dann bin ich tadellos und bin rein von schwerem Vergehen.15 Lass die Reden meines Mundes und das Sinnen meines Herzens wohlgefällig vor dir sein, HERR, mein Fels und mein Erlöser! (Ps 78,35; Ps 104,34; Ps 119,108; Phil 4,8)

Psalm 19

Nueva Versión Internacional

von Biblica
1 Los cielos cuentan la gloria de Dios, el firmamento proclama la obra de sus manos.2 Un día comparte al otro la noticia, una noche a la otra se lo hace saber.3 Sin palabras, sin lenguaje, sin una voz perceptible,4 por toda la tierra resuena su eco, ¡sus palabras llegan hasta los confines del mundo! Dios ha plantado en los cielos un pabellón para el sol.5 Y éste, como novio que sale de la cámara nupcial, se apresta, cual atleta, a recorrer el camino.6 Sale de un extremo de los cielos y, en su recorrido, llega al otro extremo, sin que nada se libre de su calor.7 La ley del Señor es perfecta: infunde nuevo aliento. El mandato del Señor es digno de confianza: da sabiduría al sencillo.8 Los preceptos del Señor son rectos: traen alegría al corazón. El mandamiento del Señor es claro: da luz a los ojos.9 El temor del Señor es puro: permanece para siempre. Las sentencias del Señor son verdaderas: todas ellas son justas.10 Son más deseables que el oro, más que mucho oro refinado; son más dulces que la miel, la miel que destila del panal.11 Por ellas queda advertido tu siervo; quien las obedece recibe una gran recompensa.12 ¿Quién está consciente de sus propios errores? ¡Perdóname aquellos de los que no estoy consciente!13 Libra, además, a tu siervo de pecar a sabiendas; no permitas que tales pecados me dominen. Así estaré libre de culpa y de multiplicar mis pecados.14 Sean, pues, aceptables ante ti mis palabras y mis pensamientos, oh Señor, roca mía y redentor mío.

Psalm 19

La Biblia Textual

von Sociedad Bíblica Iberoamericana
1 Los cielos cuentan la gloria de Dios, Y el firmamento muestra la obra de sus manos.2 Día tras día vierte su mensaje, Y noche tras noche da a conocer la sabiduría.3 No hay lenguaje ni idioma, En que la voz de ellos no sea oída,4 Su trazo llega a toda la tierra, Y sus palabras hasta los confines del orbe. En ellos puso tabernáculo para el sol,5 Y éste, como esposo que sale de su alcoba, Se alegra cual atleta corriendo la carrera.6 De un extremo de los cielos es su salida, Y su órbita hasta el término de ellos, Y nada queda escondido de su calor.7 La Ley de YHVH es perfecta, Restaura el alma. El testimonio de YHVH es fiel, Hace sabio al sencillo.8 Los mandamientos de YHVH son rectos, Alegran el corazón, El precepto de YHVH es puro, Alumbra los ojos.9 El temor de YHVH es limpio, Permanece para siempre, Los juicios de YHVH son verdad, Todos justos.10 Deseables son más que el oro, Más que mucho oro afinado, Y más dulces que la miel, Las gotas que destilan del panal.11 Tu siervo es además amonestado por ellos, En guardarlos hay grande galardón.12 ¿Quién discernirá sus propios errores? Declárame inocente de los que me son ocultos.13 Aparta también a tu siervo de las soberbias, Que no se enseñoreen de mí. Entonces seré íntegro, Y quedaré absuelto de gran transgresión.14 Sean aceptos delante de ti los dichos de mi boca, Y la meditación de mi corazón, Oh YHVH, Roca mía y Redentor mío.