Búsqueda "reino de dios" en la Biblia

Nueva Versión Internacional (Castellano)

1 Co 4:20 Porque el reino de Dios no es cuestión de palabras, sino de poder.Lc 17:19 Levántate y vete —le dijo al hombre—; tu fe te ha sanado.Mt 21:43 »Por eso os digo que se os quitará el reino de Dios y se le entregará a un pueblo que produzca los frutos del reino.Lc 12:31 Vosotros, por el contrario, buscad el reino de Dios, y estas cosas os serán añadidas.Lc 13:18 ―¿A qué se parece el reino de Dios? —continuó Jesús—. ¿Con qué voy a compararlo?Lc 11:20 Pero, si expulso a los demonios con el poder de Dios, eso significa que ha llegado a vosotros el reino de Dios.Sal 68:32 Cantad a Dios, oh reinos de la tierra, cantad salmos al Señor, SelahMt 6:33 Más bien, buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.Lc 21:31 Igualmente, cuando veáis que suceden estas cosas, sabed que el reino de Dios está cerca.Lc 17:20 Los fariseos preguntaron a Jesús cuándo iba a venir el reino de Dios, y él les respondió: ―La venida del reino de Dios no se puede calcular.Sal 45:6 Tu trono, oh Dios, permanece para siempre; el cetro de tu reino es un cetro de justicia.Lc 9:2 Entonces los envió a predicar el reino de Dios y a sanar a los enfermos.Lc 17:21 No van a decir: “¡Miradlo aquí! ¡Miradlo allá!” Sabed que el reino de Dios está entre vosotros.Dn 6:26 »He decretado que en todo lugar de mi reino la gente adore y honre al Dios de Daniel. »Porque él es el Dios vivo, y permanece para siempre. Su reino jamás será destruido, y su dominio jamás tendrá fin.Ro 14:17 porque el reino de Dios no es cuestión de comidas o bebidas, sino de justicia, paz y alegría en el Espíritu Santo.Dn 2:44 »En los días de estos reyes, el Dios del cielo establecerá un reino que jamás será destruido ni entregado a otro pueblo, sino que permanecerá para siempre y hará pedazos a todos estos reinos.Ap 5:10 De ellos hiciste un reino; los hiciste sacerdotes al servicio de nuestro Dios, y reinarán sobre la tierra».Mt 12:28 En cambio, si expulso a los demonios por medio del Espíritu de Dios, eso significa que el reino de Dios ha llegado a vosotros.Lc 13:20 Volvió a decir: ―¿Con qué voy a comparar el reino de Dios?Lc 10:9 Sanad a los enfermos que encontréis allí y decidles: “El reino de Dios ya está cerca de vosotros”.1 Co 6:10 ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los calumniadores, ni los estafadores heredarán el reino de Dios.Mr 1:15 «Se ha cumplido el tiempo —decía—. El reino de Dios está cerca. ¡Arrepentíos y creed las buenas nuevas!»Lc 9:27 Además, os aseguro que algunos de los aquí presentes no sufrirán la muerte sin antes haber visto el reino de Dios.Lc 22:18 Os digo que no volveré a beber del fruto de la vid hasta que venga el reino de Dios.1 Co 15:24 Entonces vendrá el fin, cuando él entregue el reino a Dios el Padre, después de destruir todo dominio, autoridad y poder.Mr 10:15 Os aseguro que el que no reciba el reino de Dios como un niño de ninguna manera entrará en él».Jn 3:3 De veras te aseguro que quien no nazca de nuevo no puede ver el reino de Dios —dijo Jesús.Mt 6:10 venga tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.Sal 105:13 que andaban siempre de nación en nación y de reino en reino,Sal 46:6 Se agitan las naciones, se tambalean los reinos; Dios deja oír su voz, y la tierra se derrumba.Ap 1:6 al que ha hecho de nosotros un reino, sacerdotes al servicio de Dios su Padre, ¡a él sea la gloria y el poder por los siglos de los siglos! Amén.Mr 4:26 Jesús continuó: «El reino de Dios se parece a quien esparce semilla en la tierra.Mr 4:30 También dijo: «¿Con qué vamos a comparar el reino de Dios? ¿Qué parábola podemos usar para describirlo?Mr 10:24 Los discípulos se asombraron de sus palabras. ―Hijos, ¡qué difícil es entrar en el reino de Dios! —repitió Jesús—.Is 37:16 «SEÑOR Todopoderoso, Dios de Israel, entronizado sobre los querubines: solo tú eres el Dios de todos los reinos de la tierra. Tú has hecho los cielos y la tierra.Sal 145:13 Tu reino es un reino eterno; tu dominio permanece por todos los tiempos. Fiel es el SEÑOR a su palabra y bondadoso en todas sus obras.Lc 22:16 pues os digo que no volveré a comerla hasta que tenga su pleno cumplimiento en el reino de Dios.Lc 18:17 Os aseguro que el que no reciba el reino de Dios como un niño de ninguna manera entrará en él».Dn 4:26 La orden de dejar el tocón y las raíces del árbol quiere decir que recibirás nuevamente el reino, cuando hayas reconocido que el verdadero reino es el del cielo.Dn 2:37 Tú eres rey entre los reyes; el Dios del cielo te ha dado el reino, el poder, la majestad y la gloria.Mr 9:1 Y añadió: ―Os aseguro que algunos de los aquí presentes no sufrirán la muerte sin antes haber visto el reino de Dios llegar con poder.Sal 22:28 porque del SEÑOR es el reino; él gobierna sobre las naciones.Mr 10:14 Cuando Jesús se dio cuenta, se indignó y les dijo: «Dejad que los niños vengan a mí, y no se lo impidáis, porque el reino de Dios es de quienes son como ellos.1 Cr 16:20 cuando iban de nación en nación y pasaban de reino en reino,2 Ts 1:5 Todo esto prueba que el juicio de Dios es justo, y, por tanto, él os considera dignos de su reino, por el cual estáis sufriendo.1 Co 15:50 Os declaro, hermanos, que el cuerpo mortal no puede heredar el reino de Dios, ni lo corruptible puede heredar lo incorruptible.Hch 28:31 Y predicaba el reino de Dios y enseñaba acerca del Señor Jesucristo sin impedimento y sin temor alguno.Mr 11:10 ―¡Bendito el reino venidero de nuestro padre David! ―¡Hosanna en las alturas!Dn 7:27 Entonces se dará a los santos, que son el pueblo del Altísimo, la majestad y el poder y la grandeza de los reinos. Su reino será un reino eterno, y lo adorarán y obedecerán todos los gobernantes de la tierra”.Is 37:20 Ahora, pues, SEÑOR y Dios nuestro, sálvanos de su mano, para que todos los reinos de la tierra sepan que solo tú, SEÑOR, eres Dios».Lc 9:60 ―Deja que los muertos entierren a sus propios muertos, pero tú ve y proclama el reino de Dios —le replicó Jesús.Lc 21:10 »Se levantará nación contra nación y reino contra reino —continuó—.Sal 145:11 Que hablen de la gloria de tu reino; que proclamen tus proezas,2 Cr 1:1 Salomón hijo de David consolidó su reino, pues el SEÑOR su Dios estaba con él y lo hizo muy poderoso.Dn 4:3 ¡Cuán grandes son sus señales! ¡Cuán portentosas son sus maravillas! ¡Su reino es un reino eterno! ¡Su soberanía permanece de generación en generación!Hch 14:22 fortaleciendo a los discípulos y animándolos a perseverar en la fe. «Es necesario pasar por muchas dificultades para entrar en el reino de Dios», les decían.Lc 13:29 Habrá quienes lleguen del oriente y del occidente, del norte y del sur, para sentarse al banquete en el reino de Dios.Mr 4:11 «A vosotros se os ha revelado el secreto del reino de Dios —les contestó—; pero a los de afuera todo les llega por medio de parábolas,Is 10:10 Así como alcanzó mi mano a los reinos de los ídolos, reinos cuyas imágenes superaban a las de Jerusalén y de Samaria,Mr 10:25 Le resulta más fácil a un camello pasar por el ojo de una aguja que a un rico entrar en el reino de Dios.Mt 5:10 Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque el reino de los cielos les pertenece.Is 32:1 Mirad, un rey reinará con rectitud y los gobernantes gobernarán con justicia.Ef 5:5 Porque podéis estar seguros de que nadie que sea avaro (es decir, idólatra), inmoral o impuro tendrá herencia en el reino de Cristo y de Dios.Lc 6:20 Él entonces dirigió la mirada a sus discípulos y dijo: «Dichosos vosotros los pobres, porque el reino de Dios os pertenece.Heb 12:28 Así que nosotros, que estamos recibiendo un reino inconmovible, seamos agradecidos. Inspirados por esta gratitud, adoremos a Dios como a él le agrada, con temor reverente,1 Ts 2:12 Os hemos animado, consolado y exhortado a llevar una vida digna de Dios, que os llama a su reino y a su gloria.Mt 22:2 «El reino de los cielos es como un rey que preparó un banquete de bodas para su hijo.Dn 2:40 Finalmente, vendrá un cuarto reino, sólido como el hierro. Y así como el hierro todo lo rompe, destroza y pulveriza, este cuarto reino hará polvo a los otros reinos.Lc 18:29 ―Os aseguro —respondió Jesús— que todo el que por causa del reino de Dios haya dejado casa, esposa, hermanos, padres o hijos2 R 19:15 y en su presencia oró así: «SEÑOR, Dios de Israel, entronizado sobre los querubines: solo tú eres el Dios de todos los reinos de la tierra. Tú has hecho los cielos y la tierra.Mr 10:23 Jesús miró alrededor y comentó a sus discípulos: ―¡Qué difícil es para los ricos entrar en el reino de Dios!2 P 1:11 y se os abrirán de par en par las puertas del reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.Mr 3:24 Si un reino está dividido contra sí mismo, ese reino no puede mantenerse en pie.Mt 24:7 Se levantará nación contra nación, y reino contra reino. Habrá hambres y terremotos por todas partes.Mt 19:24 De hecho, le resulta más fácil a un camello pasar por el ojo de una aguja que a un rico entrar en el reino de Dios.Hch 19:8 Pablo entró en la sinagoga y habló allí con toda valentía durante tres meses. Discutía acerca del reino de Dios, tratando de convencerlos,2 R 19:19 Ahora, pues, SEÑOR y Dios nuestro, por favor, sálvanos de su mano, para que todos los reinos de la tierra sepan que solo tú, SEÑOR, eres Dios».Mt 13:43 Entonces los justos brillarán en el reino de su Padre como el sol. El que tenga oídos, que oiga.Lc 10:11 “Aun el polvo de este pueblo, que se nos ha pegado a los pies, nos lo sacudimos en protesta contra vosotros. Pero tened por cierto que ya está cerca el reino de Dios”.Lc 18:16 Pero Jesús llamó a los niños y dijo: «Dejad que los niños vengan a mí, y no se lo impidáis, porque el reino de Dios es de quienes son como ellos.2 Ti 4:1 En presencia de Dios y de Cristo Jesús, que ha de venir en su reino y que juzgará a los vivos y a los muertos, te doy este solemne encargo:Lc 16:16 »La ley y los profetas se proclamaron hasta Juan. Desde entonces se anuncian las buenas nuevas del reino de Dios, y todos se esfuerzan por entrar en él.Lc 9:11 pero la gente se enteró y lo siguió. Él los recibió y les habló del reino de Dios. También sanó a los que lo necesitaban.Am 5:4 Así dice el SEÑOR al reino de Israel: «Buscadme y viviréis.Dn 2:39 »Después de ti surgirá otro reino de menor importancia. Luego vendrá un tercer reino, que será de bronce, y dominará sobre toda la tierra.Hch 20:25 »Ahora sé que ninguno de vosotros, entre quienes he andado predicando el reino de Dios, volverá a verme.Lc 18:25 En realidad, le resulta más fácil a un camello pasar por el ojo de una aguja que a un rico entrar en el reino de Dios.Lc 8:1 Después de esto, Jesús estuvo recorriendo los pueblos y las aldeas, proclamando las buenas nuevas del reino de Dios. Lo acompañaban los doce,Hch 8:12 Pero, cuando creyeron a Felipe, que les anunciaba las buenas nuevas del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, tanto hombres como mujeres se bautizaron.Sal 145:12 para que todo el mundo conozca tus proezas y la gloria y esplendor de tu reino.Lc 18:24 Al verlo tan afligido, Jesús comentó: ―¡Qué difícil es para los ricos entrar en el reino de Dios!2 Cr 13:5 ¿No sabéis que el SEÑOR, Dios de Israel, concedió para siempre el reino de Israel a David y a sus descendientes mediante un pacto inalterable?Jn 3:5 ―Yo te aseguro que quien no nazca de agua y del Espíritu no puede entrar en el reino de Dios —respondió Jesús—.Mt 10:7 Dondequiera que vayáis, predicad este mensaje: “El reino de los cielos está cerca”.Sal 102:22 cuando todos los pueblos y los reinos se reúnan para adorar al SEÑOR.Mr 14:25 Os aseguro que no volveré a beber del fruto de la vid hasta aquel día en que beba el vino nuevo en el reino de Dios.Mr 13:8 Se levantará nación contra nación y reino contra reino. Habrá terremotos por todas partes; también habrá hambre. Esto será solo el comienzo de los dolores.Lc 9:62 Jesús le respondió: ―Nadie que mire atrás después de poner la mano en el arado es apto para el reino de Dios.Jn 18:36 ―Mi reino no es de este mundo —contestó Jesús—. Si lo fuera, mis propios siervos pelearían para impedir que los judíos me arrestaran. Pero mi reino no es de este mundo.Mt 5:3 «Dichosos los pobres en espíritu, porque el reino de los cielos les pertenece.