Richter 10

Neue evangelistische Übersetzung

von Karl-Heinz Vanheiden
1 Nach Abimelech stand Tola Ben-Pua auf, um Israel zu helfen. Er stammte aus Issachar und wohnte in Schamir, im Gebirge Efraïm. Sein Großvater hieß Dodo.2 23 Jahre lang war er der Richter Israels. Dann starb er und wurde in Schamir begraben.3 Nach ihm stand Jaïr aus Gilead auf. Er war 22 Jahre Richter in Israel4 und hatte dreißig Söhne, die auf dreißig Eseln ritten und dreißig Ortschaften besaßen. Man nennt sie bis heute die „Zeltdörfer Jaïrs“. Sie liegen in Gilead, dem Ostjordanland.5 Als Jaïr starb, wurde er in Kamon[1] begraben.6 Und wieder taten die Israeliten, was Jahwe als böse ansah. Sie dienten den Baalen, den Astarten, den Göttern der Syrer und Sidonier, den Göttern der Moabiter, Ammoniter und Philister. Sie kehrten Jahwe den Rücken und wollten nichts mehr von ihm wissen.7 Da flammte Jahwes Zorn gegen Israel auf. Er gab sie in die Gewalt der Philister und der Ammoniter.8 Noch im selben Jahr eroberten die Ammoniter das Gebiet in Gilead, in dem sie früher gelebt hatten, und unterdrückten die Israeliten dort grausam.9 Die Ammoniter überschritten sogar den Jordan und griffen die Stämme Juda, Benjamin und Efraïm an. So gerieten die Israeliten in große Bedrängnis.10 Da schrien sie zu Jahwe um Hilfe. „Wir haben gegen dich gesündigt!“, riefen sie. „Dich, unseren Gott, haben wir verlassen und den Baalen gedient!“11 Jahwe antwortete: „Habe ich euch nicht von den Ägyptern befreit, den Amoritern, Ammonitern und Philistern?12 Habe ich euch nicht gerettet, als ihr wegen der Sidonier zu mir geschrien habt und als die Amalekiter und Maoniter[2] euch quälten?13 Doch ihr habt mich verlassen und wieder anderen Göttern gedient. Darum werde ich euch jetzt nicht mehr helfen.14 Geht und schreit doch zu den Göttern, die ihr euch ausgesucht habt! Sollen sie euch doch retten aus eurer Not!“15 Da sagten die Israeliten zu Jahwe: „Wir haben gesündigt. Bestrafe uns, wenn du willst, aber rette uns diesmal noch!“16 Darauf entfernten sie die fremden Götterbilder aus ihrer Mitte und verehrten Jahwe. Da konnte er das Elend Israels nicht länger ertragen.17 Die Ammoniter hatten ihre Truppen zusammengezogen und ihr Lager in Gilead aufgeschlagen. Die Männer Israels hatten ein Lager bei Mizpa[3] bezogen. (1Mo 31,45)18 Da sagten sich die führenden Männer von Gilead:[4] „Wir brauchen einen Heerführer, der den Kampf gegen die Ammoniter aufnimmt.“ Und sie beschlossen: „Diesen Mann werden wir zum Oberhaupt aller Bewohner Gileads machen.“

Richter 10

La Biblia Textual

von Sociedad Bíblica Iberoamericana
1 Después de Abimelec, se levantó para librar a Israel, Tola ben Púa, hijo de Dodo, varón de Isacar, el cual habitó en Samir, en la serranía de Efraín.2 Éste juzgó a Israel durante veintitrés años, y murió, y fue sepultado en Samir.3 Tras él se levantó Jaír galaadita, el cual juzgó a Israel veintidós años.4 Tuvo treinta hijos, que cabalgaban en treinta asnos y poseían treinta villas en la tierra de Galaad, que hasta hoy se llaman Havot-Jaír.5 Y murió Jaír, y fue sepultado en Camón.6 Pero los hijos de Israel volvieron a hacer lo malo ante los ojos de YHVH y sirvieron a los baales y a las Astarot, a los dioses de Siria, a los dioses de Sidón, a los dioses de Moab, a los dioses de los hijos de Amón y a los dioses de los filisteos, y abandonaron a YHVH y no le sirvieron.7 Y se encendió la ira de YHVH contra Israel, y los vendió en mano de los filisteos, y en mano de los hijos de Amón,8 quienes a partir de aquel año oprimieron y vejaron a los israelitas durante dieciocho años, a todos los hijos de Israel que vivían allende el Jordán, en tierra de los amorreos, en Galaad.9 Así pues, los hijos de Amón cruzaron el Jordán para combatir también contra Judá, contra Benjamín y contra la casa de Efraín; y esto angustió a Israel en gran manera.10 Entonces los hijos de Israel clamaron a YHVH, y dijeron: ¡Hemos pecado contra ti, porque hemos abandonado a nuestro Dios para servir a los baales!11 Y dijo YHVH a los hijos de Israel: ¿No os libré Yo de Egipto, y de los amorreos, y de los hijos de Amón, y de los filisteos?12 Y cuando los sidonios, y los amalecitas, y los maonitas os oprimieron, y clamasteis a mí, ¿no os libré de su mano?13 Con todo esto vosotros me habéis abandonado y habéis servido a otros dioses. Por tanto, no os volveré más a librar.14 ¡Id, clamad a los dioses que os habéis elegido! ¡Que ellos os salven en el tiempo de vuestra angustia!15 Entonces los hijos de Israel respondieron a YHVH: ¡Hemos pecado! ¡Haz con nosotros según sea bueno ante tus ojos, con tal que nos libres, te rogamos, en este día!16 Y apartaron los dioses extraños de en medio de sí y sirvieron a YHVH, cuyo sentir se impacientó por la desdicha de Israel.17 Entretanto los hijos de Amón se habían reunido y habían acampado en Galaad; asimismo los hijos de Israel se reunieron, y acamparon en Mizpa.18 Y decían los principales del pueblo de Galaad, cada cual a su prójimo: ¿Quién será el hombre que inicie la lucha contra los hijos de Amón? Él se convertirá en caudillo de todos los habitantes de Galaad.