Jeremia 42

Neue evangelistische Übersetzung

von Karl-Heinz Vanheiden
1 Da kamen alle Offiziere, auch Johanan Ben-Kareach und Jesanja[1] Ben-Hoschaja mit dem ganzen Volk, Groß und Klein, zum Propheten Jeremia.2 Sie baten ihn: „Wir flehen dich an: Bete für uns zu Jahwe, deinem Gott! Bete für den Rest dieses Volkes, denn du siehst, wie wenige von uns übrig geblieben sind!3 Bitte Jahwe, deinen Gott, dass er uns sagt, wohin wir gehen und was wir tun sollen!“4 Jeremia antwortete ihnen: „Ich habe es gehört und will eure Bitte vor Jahwe, euren Gott, bringen, so wie ihr es gesagt habt. Und ich verspreche, dass ich euch alles mitteilen werde, was Jahwe euch antwortet; ich werde euch nichts verschweigen.“5 Sie versicherten ihm: „Jahwe soll als wahrhaftiger und zuverlässiger Zeuge gegen uns auftreten, wenn wir uns nicht genau nach dem richten, was Jahwe, dein Gott, uns durch dich sagen lässt.6 Egal ob es uns gut oder schlecht erscheint, wir wollen auf Jahwe, unseren Gott, hören, zu dem wir dich senden. Denn wenn wir auf Jahwe, unseren Gott, hören, wird es uns gut gehen.“7 Zehn Tage später kam das Wort Jahwes zu Jeremia.8 Da rief er Johanan Ben-Kareach, die Offiziere und das ganze Volk vom Kleinsten bis zum Größten zusammen9 und sagte zu ihnen: „So spricht Jahwe, der Gott Israels, zu dem ihr mich mit eurem Anliegen geschickt habt:10 Wenn ihr in diesem Land wohnen bleibt, werde ich euch aufbauen und nicht abreißen, euch einpflanzen und nicht ausreißen. Denn das Unglück, das ich über euch hereinbrechen ließ, tut mir weh.11 Ihr habt jetzt Angst vor dem König von Babylon, aber ihr müsst euch nicht vor ihm fürchten“, spricht Jahwe, „denn ich bin bei euch und werde euch aus seiner Hand retten.12 Ich bringe ihn dazu, dass er Erbarmen mit euch hat und euch in eurem Land bleiben lässt.13 Wenn ihr aber sagt: 'Nein, wir wollen nicht in diesem Land bleiben!', wenn ihr nicht auf Jahwe, euren Gott, hört14 und sagt: 'Nein, wir wollen nach Ägypten ziehen und dort bleiben, wo wir nichts mehr vom Krieg sehen, keine Alarmsignale hören und nicht hungern müssen!' –15 Dann höre das Wort Jahwes, Rest von Juda: So spricht Jahwe, der allmächtige Gott Israels: Wenn ihr wirklich darauf besteht, nach Ägypten auszuwandern,16 dann wird euch das Schwert, das ihr fürchtet, dort in Ägypten erreichen. Der Hunger, der euch Angst macht, wird dort in Ägypten hinter euch her sein und ihr werdet dort sterben.17 Alle Männer, die sich entschlossen haben, nach Ägypten auszuwandern, werden dort durch Schwert, Hunger und Pest sterben. Keiner wird dem Unheil entkommen, das ich über sie bringen werde.18 Denn so spricht Jahwe, der allmächtige Gott Israels: Genauso wie mein wütender Zorn die Bewohner Jerusalems getroffen hat, wird er auch über euch kommen, wenn ihr nach Ägypten zieht. Ihr werdet dort zum Fluch werden und zu einem Bild des Entsetzens. Man wird euer Schicksal zur Verwünschung und Beschimpfung benutzen. Und dieses Land werdet ihr nie wieder sehen.“19 „Jahwe hat zu euch gesprochen, Rest von Juda! Zieht nicht nach Ägypten! Ihr sollt genau wissen, dass ich euch heute gewarnt habe.20 Ihr setzt nur euer Leben aufs Spiel! Erst schickt ihr mich zu Jahwe, eurem Gott, und sagt: 'Bete für uns zu Jahwe, unserem Gott, und teile uns dann alles mit, was er gesagt hat. Wir werden uns danach richten!'21 Heute habe ich euch den Bescheid gegeben, aber ihr wollt nicht hören, was Jahwe, euer Gott, euch durch mich sagen lässt.22 Jetzt sollt ihr wissen, dass ihr in dem Land, in das ihr auswandern wollt, durch Schwert, Hunger und Pest sterben werdet.“

Jeremia 42

La Biblia Textual

von Sociedad Bíblica Iberoamericana
1 Todos los capitanes de la gente de guerra, junto a Johanán ben Carea, Jezanías ben Osaías, y todo el pueblo, desde el menor hasta el mayor, se acercaron2 y dijeron al profeta Jeremías: Acepta ahora nuestro ruego delante de ti, y ora por nosotros a YHVH tu Dios por todo este remanente, porque de muchos que éramos, hemos quedado pocos, así como nos están viendo tus ojos,3 para que YHVH tu Dios nos enseñe el camino por donde debemos andar, y lo que hemos de hacer.4 El profeta Jeremías les respondió: He oído. Mirad, voy a orar a YHVH vuestro Dios, como habéis dicho, y todo lo que YHVH os respondiere, os enseñaré. No os reservaré palabra.5 Ellos dijeron a Jeremías: ¡Sea YHVH entre nosotros por testigo fiel y verdadero! Juramos obrar conforme a todo aquello para lo cual YHVH tu Dios te envíe a nosotros.6 Sea bueno, sea malo, obedeceremos la voz de YHVH nuestro Dios, al cual te enviamos, para que nos vaya bien cuando obedezcamos la voz de YHVH nuestro Dios.7 Al cabo de diez días Jeremías tuvo palabra de YHVH.8 Y llamó a Johanán ben Carea y a todos los capitanes de la gente de guerra que estaban con él, y a todo el pueblo, desde el menor hasta el mayor,9 y les dijo: Así dice YHVH Dios de Israel, al cual me enviasteis para presentar vuestros ruegos delante de Él:10 Si permanecéis quietos en esta tierra, Yo os edificaré, y no os destruiré. Os plantaré, y no os arrancaré, porque me pesa todo el mal que os he hecho.11 No temáis de la presencia del rey de Babilonia, del cual tenéis temor. No temáis de su presencia, dice YHVH, porque Yo estoy con vosotros para salvaros y libraros de su mano.12 Yo tendré de vosotros misericordia, y él tendrá misericordia de vosotros, y os hará regresar a vuestra tierra.13 Pero si decís: No habitaremos en esta tierra; desobedeciendo así la voz de YHVH vuestro Dios,14 diciendo: No, sino que entraremos en la tierra de Egipto, donde no veremos guerra, ni oiremos sonido de trompeta, ni padeceremos hambre, y allá moraremos.15 Entonces escuchad la palabra de YHVH, oh remanente de Judá: Así dice YHVH Sebaot, Dios de Israel: Si volvéis vuestros rostros para entrar en Egipto, y entráis para peregrinar allá,16 sucederá que la espada que teméis, allí os alcanzará, en la tierra de Egipto, y el hambre de que tenéis temor, os perseguirá duramente en Egipto, y allí moriréis.17 Todos los hombres que vuelvan sus rostros para entrar en Egipto para peregrinar allí, morirán a espada, de hambre y de pestilencia. Ninguno de ellos quedará vivo, ni escapará del mal que Yo traeré sobre ellos.18 Porque así dice YHVH Sebaot, Dios de Israel: Como mi ira y mi indignación se derramó sobre los moradores de Jerusalem, así se derramará mi ira sobre vosotros si vais a Egipto. Y seréis objeto de execración y espanto, de maldición y afrenta, y no veréis más este lugar.19 Oh remanente de Judá: YHVH ha hablado sobre vosotros: ¡No entréis en Egipto! Sabed ciertamente que en este día os lo he advertido.20 ¿Por qué os engañáis a vosotros mismos? Porque vosotros me enviasteis a YHVH vuestro Dios, diciendo: Ora por nosotros a YHVH nuestro Dios, y haznos saber todas las cosas que YHVH nuestro Dios diga, y lo haremos.21 Y os lo he declarado hoy, y no habéis obedecido la voz de YHVH vuestro Dios, ni todas las cosas por las cuales me envió a vosotros.22 Ahora pues, sabed por cierto que a espada, de hambre y de pestilencia moriréis en el lugar donde deseasteis entrar para habitar allí.