Salmo 142

La Biblia Textual

de Sociedad Bíblica Iberoamericana
1 Con mi voz clamo a YHVH, Con mi voz ruego a YHVH misericordia.2 Ante su presencia derramo mis afanes, Ante su presencia expongo mi angustia,3 Mientras mi espíritu desmaya dentro de mí. Pero Tú conoces mi sendero, Que en el camino por donde avanzo me han escondido una trampa.4 Mira a mi diestra y observa, que no hay quien me reconozca. No tengo refugio ni hay quien pregunte por mí.5 ¡A ti clamo, oh YHVH! Te digo: Tú eres mi refugio, Mi porción en la tierra de los vivientes.6 ¡Oye mi clamor, porque estoy abatido en gran manera! Líbrame de los que me persiguen, porque son más fuertes que yo.7 Saca mi alma de la prisión, para que dé gracias a tu Nombre, Me rodearán los justos, porque Tú me serás propicio.

Salmo 142

Nueva Biblia Viva

de Biblica
1 ¡Cómo le suplico a Dios; cómo imploro su misericordia2 y derramo ante él mis quejas y le cuento mis problemas!3 Porque estoy abrumado y desesperado, y sólo tú sabes qué rumbo debo tomar. Por donde quiera que vaya, mis enemigos me ponen trampas.4 Mira a mi derecha y ve: nadie me tiende la mano. Nadie me ayuda; a nadie le interesa lo que me pase.5 Entonces, oro a ti, SEÑOR, y te digo: «Tú eres mi refugio, tú eres lo único que yo quiero en la vida».6 Escucha mi clamor, pues estoy muy deprimido. Rescátame de mis perseguidores, pues son demasiado fuertes para mí.7 Sácame de la prisión para que pueda darte gracias. Los justos se reunirán a mi alrededor porque eres bueno conmigo.

Salmo 142

Nueva Versión Internacional

de Biblica
1 A voz en cuello, al Señor le pido ayuda; a voz en cuello, al Señor le pido compasión.2 Ante él expongo mis quejas; ante él expreso mis angustias.3 Cuando ya no me queda aliento, tú me muestras el camino.[1] Por la senda que transito algunos me han tendido una trampa.4 Mira a mi derecha, y ve: nadie me tiende la mano. No tengo dónde refugiarme; por mí nadie se preocupa.5 A ti, Señor, te pido ayuda; a ti te digo: «Tú eres mi refugio, mi porción en la tierra de los vivientes.»6 Atiende a mi clamor, porque me siento muy débil; líbrame de mis perseguidores, porque son más fuertes que yo.7 Sácame de la prisión, para que alabe yo tu nombre. Los justos se reunirán en torno mío por la bondad que me has mostrado.

Salmo 142

Nueva Versión Internacional (Castellano)

de Biblica
1 A gritos, le pido al SEÑOR ayuda; a gritos, le pido al SEÑOR compasión.2 Ante él expongo mis quejas; ante él expreso mis angustias.3 Cuando ya no me queda aliento, tú me muestras el camino.[1] Por la senda que transito, algunos me han tendido una trampa.4 Mira a mi derecha, y ve: nadie me tiende la mano. No tengo dónde refugiarme; por mí nadie se preocupa.5 A ti, SEÑOR, te pido ayuda; a ti te digo: «Tú eres mi refugio, mi porción en la tierra de los vivos».6 Atiende a mi clamor, porque me siento muy débil; líbrame de mis perseguidores, porque son más fuertes que yo.7 Sácame de la prisión, para que alabe yo tu nombre. Los justos se reunirán en torno a mí por la bondad que me has mostrado.