1.Mose 1 | Neue evangelistische Übersetzung La Biblia Textual

1.Mose 1 | Neue evangelistische Übersetzung

Das Buch von den Anfängen

Wie es mit der Welt, den Menschen und dem Volk Israel anfing. Der Anfang der Welt

1 Im Anfang schuf Gott* Himmel und Erde. 2 Die Erde war formlos und leer. Finsternis lag über der Tiefe, und der Geist Gottes schwebte über dem Wasser. 3 Da sprach Gott: „Es werde Licht!“ Und das Licht entstand. 4 Gott sah es an: Es war gut. Da trennte Gott das Licht von der Finsternis. 5 Das Licht nannte er „Tag“ und die Finsternis „Nacht“. Es wurde Abend und es wurde Morgen – ein Tag. 6 Dann sprach Gott: „Mitten im Wasser soll eine Wölbung* entstehen, eine Trennung zwischen Wasser und Wasser!“ 7 So geschah es auch. Gott machte die Wölbung und trennte das Wasser unterhalb der Wölbung von dem Wasser darüber. 8 Die Wölbung nannte Gott „Himmel“. Es wurde Abend und wieder Morgen – zweiter Tag. 9 Dann sprach Gott: „Das Wasser unter dem Himmel soll sich an einem Ort sammeln, damit das Land zum Vorschein kommt.“ So geschah es. 10 Und Gott nannte das trockene Land „Erde“. Die Ansammlung der Wasser aber nannte er „Meer“. Gott sah alles an: Es war gut. 11 Dann sprach Gott: „Die Erde lasse Gras hervorsprießen. Pflanzen und Bäume jeder Art sollen wachsen und Samen oder samenhaltige Früchte tragen.“ So geschah es. 12 Die Erde brachte frisches Grün hervor, alle Sorten samentragender Pflanzen und jede Art von Bäumen mit samenhaltigen Früchten. Gott sah es an: Es war gut. 13 Es wurde Abend und wieder Morgen – dritter Tag. 14 Dann sprach Gott: „An der Wölbung des Himmels sollen Lichter entstehen. Sie sollen Tag und Nacht voneinander trennen, und als leuchtende Zeichen sollen sie die Zeiten bestimmen: Tage, Feste und Jahre. 15 Außerdem sollen sie als Lichter am Himmelsgewölbe die Erde beleuchten.“ So geschah es. 16 Gott machte die beiden großen Lichter: das größere, das den Tag regiert, und das kleinere für die Nacht; und dazu die Sterne. 17 Er setzte sie an das Himmelsgewölbe, damit sie über die Erde leuchten. 18 Sie sollten den Tag und die Nacht regieren und Licht und Finsternis voneinander trennen. Gott sah es an: Es war gut. 19 Es wurde Abend und wieder Morgen – vierter Tag. 20 Dann sprach Gott: „Im Wasser soll es von Lebewesen aller Art wimmeln und am Himmel sollen Vögel fliegen!“ 21 Da schuf Gott die großen Seeungeheuer und Wesen aller Art, von denen es in den Gewässern wimmelt, dazu alle Arten von gefiederten Vögeln. Gott sah es an: Es war gut. 22 Da segnete Gott seine Geschöpfe: „Seid fruchtbar und vermehrt euch und füllt das Wasser in den Meeren! Und auch ihr Vögel, vermehrt euch auf der Erde!“ 23 Es wurde Abend und wieder Morgen – fünfter Tag. 24 Dann sprach Gott: „Die Erde soll alle Arten von Lebewesen hervorbringen: Herdenvieh und wilde Tiere und alles, was kriecht!“ So geschah es. 25 Gott machte alle Arten von wilden Tieren, von Herdenvieh und von allem, was sich auf der Erde regt. Gott sah es an: Es war gut. 26 Dann sprach Gott: „Lasst uns* Menschen* machen als Abbild von uns, uns ähnlich.* Sie sollen über die Fische im Meer herrschen, über die Vögel am Himmel und über die Landtiere, über die ganze Erde und alles, was auf ihr kriecht!“ 27 Da schuf Gott den Menschen nach seinem Bild, er schuf ihn als sein Ebenbild, als Mann und Frau schuf er sie.* 28 Gott segnete sie dann und sagte zu ihnen: „Seid fruchtbar und vermehrt euch!* Füllt die Erde und macht sie euch untertan! Herrscht über die Fische im Meer, über die Vögel am Himmel und über alle Tiere, die auf der Erde leben!“ 29 Gott sagte: „Zur Nahrung gebe ich euch alle samentragenden Pflanzen und alle samenhaltigen Früchte von Bäumen – überall auf der Erde. 30 Allen Landtieren, allen Vögeln und allen Lebewesen, die auf dem Boden kriechen, gebe ich Gras und Blätter zur Nahrung.“ So geschah es. 31 Gott sah alles an, was er gemacht hatte: Es war tatsächlich sehr gut. Es wurde Abend und wieder Morgen – der sechste Tag.
La Biblia Textual

La creación

1 En un principio creó ’Elohim los cielos y la tierra. 2 Pero la tierra llegó a estar desolada y vacía, y había tinieblas sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se cernía sobre la faz de las aguas. 3 Entonces dijo ’Elohim: Haya luz. Y hubo luz. 4 Y vio ’Elohim que la luz era buena, y ’Elohim hizo separación entre la luz y la oscuridad. 5 Y llamó ’Elohim a la luz día y a la oscuridad llamó noche. Y fue la tarde y fue la mañana: Día uno. 6 Y dijo ’Elohim: Haya expansión en medio de las aguas y separe las aguas de las aguas. 7 E hizo ’Elohim la expansión, y estableció separación entre las aguas que estaban debajo de la expansión y las aguas que estaban encima de la expansión. Y fue así. 8 Y llamó ’Elohim a la expansión cielos. Y fue la tarde y fue la mañana: Día segundo. 9 Y dijo ’Elohim: Reúnanse las aguas de debajo de los cielos en un solo lugar, y muéstrese lo seco. Y fue así. 10 Y a lo seco llamó ’Elohim tierra, y a la reunión de las aguas llamó mares. Y vio ’Elohim que estaba bien. 11 Entonces dijo ’Elohim: Produzca la tierra vegetación: hierba que haga germinar semilla, árbol frutal que dé fruto sobre la tierra según su especie, cuya semilla esté en él. Y fue así. 12 Y la tierra hizo brotar vegetación: hierba que hace germinar semilla según su especie, y árbol que da fruto, cuya semilla está en él, según su especie. Y vio ’Elohim que estaba bien. 13 Y fue la tarde y fue la mañana: Día tercero. 14 Y dijo ’Elohim: Haya lumbreras en la expansión de los cielos para diferenciar entre el día y la noche, y sirvan para señales, y para las estaciones, y para días y años, 15 y sean por luminarias en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra. Y fue así. 16 E hizo ’Elohim las dos grandes lumbreras: la lumbrera mayor para regir el día, y la lumbrera menor para regir la noche. 17 Y puso ’Elohim las estrellas en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra, 18 y para regir durante el día y la noche, y para separar la luz de la oscuridad. Y vio ’Elohim que estaba bien. 19 Y fue la tarde y fue la mañana: Día cuarto. 20 Entonces dijo ’Elohim: Bullan las aguas seres vivientes y ave que vuele sobre la tierra en la expansión de los cielos. 21 Y creó ’Elohim los grandes monstruos marinos y todo ser vivo que repta, que poblaron las aguas, según su especie, y toda ave alada según su especie. Y vio ’Elohim que estaba bien. 22 Y ’Elohim los bendijo diciendo: Fructificad y multiplicaos, llenad las aguas en los mares y multiplíquese el ave en la tierra. 23 Y fue la tarde y fue la mañana: Día quinto. 24 Entonces dijo ’Elohim: Produzca la tierra seres vivientes según su especie: ganado, reptiles y bestias de la tierra, según su especie. Y fue así. 25 E hizo ’Elohim las bestias de la tierra según su especie, y el ganado según su especie, y todo reptil del suelo según su especie. Y vio ’Elohim que estaba bien.

El hombre

26 Entonces dijo ’Elohim: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza, y ejerzan dominio sobre los peces del mar, sobre las aves de los cielos, sobre el ganado, sobre toda la tierra, y sobre todo reptil que repta sobre la tierra. 27 Y creó ’Elohim al hombre a su imagen, a imagen de ’Elohim lo creó, macho y hembra los creó. 28 Luego ’Elohim los bendijo; y les dijo ’Elohim: Fructificad y multiplicaos, llenad la tierra y sojuzgadla, dominad sobre los peces del mar y las aves de los cielos y sobre todo ser vivo que se mueve sobre la tierra. 29 Y dijo ’Elohim: He aquí os he dado toda hierba que produce semilla que está sobre la faz de toda la tierra, y todo árbol en el que hay fruto y que produce semilla, os será de alimento. 30 Y a toda bestia de la tierra, y a toda ave de los cielos, y a todo lo que repta sobre la tierra, en los cuales hay vida, toda hierba verde les será por alimento. Y fue así. 31 Y vio ’Elohim todo lo que había hecho, y he aquí estaba muy bien. Y fue la tarde y fue la mañana: El día sexto.