Jakobus 5 | Einheitsübersetzung 2016 Nueva Versión Internacional (Castellano)

Jakobus 5 | Einheitsübersetzung 2016

Warnung an die hartherzigen Reichen

1 Ihr aber, ihr Reichen, weint nur und klagt über das Elend, das über euch kommen wird! 2 Euer Reichtum verfault und eure Kleider sind von Motten zerfressen, 3 euer Gold und Silber verrostet. Ihr Rost wird als Zeuge gegen euch auftreten und euer Fleisch fressen wie Feuer. Noch in den letzten Tagen habt ihr Schätze gesammelt. 4 Siehe, der Lohn der Arbeiter, die eure Felder abgemäht haben, der Lohn, den ihr ihnen vorenthalten habt, schreit zum Himmel; die Klagerufe derer, die eure Ernte eingebracht haben, sind bis zu den Ohren des Herrn Zebaoth gedrungen. 5 Ihr habt auf Erden geschwelgt und geprasst und noch am Schlachttag habt ihr eure Herzen gemästet. 6 Verurteilt und umgebracht habt ihr den Gerechten, er aber leistete euch keinen Widerstand.

Mahnung zur Geduld

7 Darum, Brüder und Schwestern, haltet geduldig aus bis zur Ankunft des Herrn! Siehe, auch der Bauer wartet auf die kostbare Frucht der Erde, er wartet geduldig auf sie, bis Frühregen oder Spätregen fällt. 8 Ebenso geduldig sollt auch ihr sein; macht eure Herzen stark, denn die Ankunft des Herrn steht nahe bevor. 9 Klagt nicht übereinander, Brüder und Schwestern, damit ihr nicht gerichtet werdet! Seht, der Richter steht schon vor der Tür. 10 Brüder und Schwestern, im Leiden und in der Geduld nehmt euch die Propheten zum Vorbild, die im Namen des Herrn gesprochen haben! 11 Siehe, wir preisen selig, die geduldig alles ertragen haben. Ihr habt von der Ausdauer des Ijob gehört und das Ende gesehen, das der Herr herbeigeführt hat. Denn der Herr ist voll Erbarmen und Mitleid.

Verbot des Schwörens

12 Vor allem aber, meine Brüder und Schwestern, schwört nicht, weder beim Himmel noch bei der Erde noch irgendeinen anderen Eid! Euer Ja soll ein Ja sein und euer Nein ein Nein, damit ihr nicht dem Gericht verfallt.

Von der Macht des Gebetes

13 Ist einer von euch bedrückt? Dann soll er beten. Ist jemand guten Mutes? Dann soll er ein Loblied singen. 14 Ist einer unter euch krank, dann rufe er die Ältesten der Gemeinde zu sich; sie sollen Gebete über ihn sprechen und ihn im Namen des Herrn mit Öl salben. 15 Das gläubige Gebet wird den Kranken retten und der Herr wird ihn aufrichten; und wenn er Sünden begangen hat, werden sie ihm vergeben. 16 Darum bekennt einander eure Sünden und betet füreinander, damit ihr geheilt werdet! Viel vermag das inständige Gebet eines Gerechten. 17 Elija war ein Mensch wie wir; er betete inständig, es solle nicht regnen, und es regnete drei Jahre und sechs Monate nicht auf der Erde. 18 Und wiederum betete er; da gab der Himmel Regen und die Erde brachte ihre Früchte hervor.

Verantwortung für den verirrten Bruder

19 Meine Brüder und Schwestern, wenn einer unter euch von der Wahrheit abirrt und jemand ihn zur Umkehr bewegt, 20 dann soll er wissen: Wer einen Sünder, der auf einem Irrweg ist, zur Umkehr bewegt, rettet ihn vor dem Tod und deckt viele Sünden zu.

Einheitsübersetzung der Heiligen Schrift © 2016 Katholische Bibelanstalt GmbH, Stuttgart Alle Rechte vorbehalten. Die Herausgeber sind: (Erz-)Bischöfe Deutschlands, Österreichs, der Schweiz u.a. Herausgebender Verlag: Katholische Bibelanstalt GmbH www.bibelwerk.de

Nueva Versión Internacional (Castellano)

Advertencia a los ricos opresores

1 Ahora escuchad, vosotros los ricos: ¡llorad a gritos por las calamidades que se os vienen encima! 2 Se ha podrido vuestra riqueza, y vuestras ropas están comidas por la polilla. 3 Se han oxidado vuestro oro y vuestra plata. Ese óxido dará testimonio contra vosotros y consumirá como fuego vuestros cuerpos. Habéis amontonado riquezas, ¡y eso que estamos en los últimos tiempos! 4 Oíd cómo clama contra vosotros el salario no pagado a los obreros que trabajaron vuestros campos. El clamor de esos trabajadores ha llegado a oídos del Señor Todopoderoso. 5 Vosotros habéis llevado en este mundo una vida de lujo y de placer desenfrenado. Lo que habéis hecho es engordar para el día de la matanza.* 6 Habéis condenado y matado al justo sin que él os ofreciera resistencia.

Paciencia en los sufrimientos

7 Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad cómo espera el agricultor a que la tierra dé su precioso fruto y con qué paciencia aguarda las temporadas de lluvia. 8 Así también vosotros, manteneos firmes y aguardad con paciencia la venida del Señor, que ya se acerca. 9 No os quejéis unos de otros, hermanos, para que no seáis juzgados. ¡El juez ya está a la puerta! 10 Hermanos, tomad como ejemplo de sufrimiento y de paciencia a los profetas que hablaron en el nombre del Señor. 11 En verdad, consideramos dichosos a los que perseveraron. Habéis oído hablar de la perseverancia de Job, y habéis visto lo que al final le dio el Señor. Es que el Señor es muy compasivo y misericordioso. 12 Sobre todo, hermanos míos, no juréis ni por el cielo ni por la tierra ni por ninguna otra cosa. Que vuestro«sí» sea«sí», y vuestro«no», «no», para que no seáis condenados.

La oración de fe

13 ¿Está afligido alguno entre vosotros? Que ore. ¿Está alguno de buen ánimo? Que cante alabanzas. 14 ¿Está enfermo alguno de vosotros? Haga llamar a los ancianos de la iglesia para que oren por él y lo unjan con aceite en el nombre del Señor. 15 La oración de fe sanará al enfermo y el Señor lo levantará. Y, si ha pecado, su pecado se le perdonará. 16 Por eso, confesaos unos a otros vuestros pecados, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración del justo es poderosa y eficaz. 17 Elías era un hombre con debilidades como las nuestras. Con fervor oró que no lloviera, y no llovió sobre la tierra durante tres años y medio. 18 Volvió a orar, y el cielo dio su lluvia y la tierra produjo sus frutos. 19 Hermanos míos, si alguno de vosotros se extravía de la verdad, y otro lo hace volver a ella, 20 recordad que quien hace volver a un pecador de su extravío le salvará de la muerte y cubrirá muchísimos pecados.